Templos y mas Templos! Bagan alberga mas de dos mil estructuras entre pagodas, templos y monasterios en su mayoría dedicados a Buda. Es una maravilla por lo que fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 2014.

La razón principal de visitar Myanmar es Bagan. Es algo único en el mundo, miles de templos que pueden ser admirados desde el cielo si se elige sobrevolarlos en globo.

Llegamos a Nyaung –U  en un vuelo directo con Air KBZ de Yangon. Los vuelos son bastante accesibles ya que hay muchos vuelos al día y los precios oscilan entre 50 – 80 USD aproximadamente y pueden comprarse 3 meses antes. Hay que tener en cuenta que al llegar al aeropuerto hay un cargo para todos los turistas de 15 USD por concepto de visita a la zona arqueológica, esto prácticamente cubre todas las entradas a los templos en Bagan.

Hay muchas opciones de hospedaje, en nuestro caso optamos por el Hotel Yadanarbon Bagan, un hotel bastante acogedor con tarifas abajo de los 50 USD por noche incluyendo Internet y desayuno.

El hotel nos ofreció un auto con chófer que nos llevaría todo el día a recorrer los templos mas importantes. Es una opción bastante buena considerando que el costo es muy bajo.

Los templos de Bagan se pueden recorrer a pie (sobre todo si estás alojado en la zona de Old Bagan), en coche con conductor, en carro con caballos, en bicicleta normal, en bicicleta eléctrica o en canoa para disfrutar de su silueta desde el río.

Hay algunos templos mas famosos como el Ananda, Dhammayangyi, Sulamani, Shwezigon o Thatbyinnyu. El hotel nos dio una guía de los templos mas importantes, aunque es difícil recorrerlos todos, uno puede ir eligiendo que visitar durante el camino.

Una regla general es que tienes que entrar a los templos descalzo, es por ellos que la mejor época para visitar Bagan es de Octubre a Marzo ya que no son meses tan calientes. Nosotros visitamos la ciudad en Mayo y puedo asegurarles que las altas temperaturas hacían imposible visitar los templos a ciertas horas del día.

El interior de muchos templos están bastante oscuros, por lo que es recomendable llevar siempre consigo una linterna para poder contemplar mejor las pinturas en las paredes.

Según cuenta la historia, el nacimiento de Bagan como capital fue paralelo en el tiempo a su conversión al budismo therevada allá por el siglo XI. El rey bamar que gobernaba por aquella época, Anawratha, se vio tan impresionado por esta nueva religión que decidió encargar a los arquitectos que construyeran algo digno de Buda.

De esta manera comenzaron a construir y a construir. Bagan reunió tantos lugares de culto que llegó a convertirse en un lugar de peregrinación para todos los fieles del Sudeste Asiático. Tras Anawratha vinieron más reyes, pero todos tuvieron en mente continuar convirtiendo Bagan en el lugar con más templos, monasterios y palacios de todo el Imperio. Y así sucedió durante unos 230 años.

Existen diferentes versiones sobre el por qué esta ciudad tan imponente comenzó a tener cada vez menos y menos importancia hasta el punto de alcanzar su máxima decadencia. Algunos historiadores defienden que fueron los ataques de los mongoles que saquearon la ciudad los que motivaron su abandono. Otros dicen que ante la inminente llegada de China para conquistar el lugar, el último rey de Bagan decidió huir hacia el sur.

Durante dos siglos Bagan cayó en el abandono y fueron muchos los terremotos que la asolaron. Una gran cantidad de templos se destruyeron o  fueron arrasados hasta el punto de quedar sólo sus cimientos.

En la mayoría de los templos se pueden encontrar cuatro accesos diferentes, uno en cada lateral los cuales conducen al interior. A la entrada de cada uno de ellos se erguía la figura de un Buda. A veces tan grande que era necesario alzar la mirada para poder llegar a ver su cara y otras apenas de un metro de altura. En ocasiones hechas de oro, y en otras de piedra pintada. Cada Buda tiene una posición diferente.

En el abhaya mudra la mano derecha se eleva , los dedos se abren y la palma de la mano se coloca hacia fuera. La mano izquierda permanece en la misma posición.  Representa la ausencia de  miedo y la protección.

 

Uno de las cosas que nos te puedes perder es contemplar el atardecer. Allí escogimos el sitio que más nos gusto y nos dedicamos a esperar a que el sol se metiera poco a poco. El inmenso campo de estupas nos hacía suspirar y pensar que tan vez estábamos contemplando uno de los hermosos atardeceres que hayamos visto en nuestra vida.

Nuestro paso por Bagan fue algo memorable, lo único que lamentamos es no poder admirarlo desde un globo ya que solo es posible en ciertas épocas del año.

Tips: Reservar hotel con tiempo ya que en temporada alta puede ser imposible encontrar disponbilidad. Recorrer los templos en goblo es algo que no se debe perder. Llevar moneda local puede resultar mas conveniente aunque tambien aceptan USD. No perderse el atardecer.