Skagway se encuentra al sur de Alaska. Esta pequeña y pintoresca ciudad, que cuenta con sólo 862 habitantes fue creada principalmente como un centro de transporte dentro y fuera de la zona de Yukon donde las operaciones mineras de oro eran desenfrenadas. En 1898, decenas de miles de aventureros llegaron a la ciudad en busca de fortuna.

Muy temprano arribamos a lo que sería la tercer escala en nuestro crucero por Alaska. Para poder llegar a la zona turística se puede caminar por unos 15 minutos desde el puerto, o bien, tomar un corto paseo en tren.
El centro está dedicado a los turistas y esconde historias increíbles. La primera impresión que tuve es como si estuviera en el escenario de una película del oeste.

En la avenida Broadway  se localizan los más importantes establecimientos; muchos de ellos conservados desde sus orígenes. Las oficinas del White Pass & Yukon Route (1898), Washington Fruit Store (1899), Bowman Barber Shop (1897), Boss Bakery (1897), el Mondamin, el Pacific y el Golden North Hotel (1898) y, sobre todo junto con el Mascot, el famoso primer burdel de Skagway: el Red Onion Saloon.

El Red Onion fue construido en 1897 y operaba como un bar y en el piso superior era un burdel. Allí, en su planta baja, solo se servía alcohol por las chicas, aún cuando en el piso superior ofrecían habitaciones privadas, previo pago de $5, preferiblemente en oro. Ahora es casi una parada turística obligada donde puedes tomarte un café, cerveza o licor, servidas por las camareras con sus típicos vestidos.

Skagway cuenta con una escuela, un periódico que publica dos veces al mes y recibe una señal AM y una FM de poblaciones cercanas. Es increíble como una ciudad así de pequeña pueda recibir hasta cinco cruceros al día, de mayo a septiembre, y un aproximado de 800.000 visitantes cada verano. Eso sí, hay muchas tiendas de pieles y joyería las cuales abren solamente en la época del turismo. Al visitar una tienda de pieles nos encontramos con que los dueños son mexicanos (de Guadalajara) y nos comentaron que en el invierno este lugar mas bien parece un pueblo fantasma ya que la cantidad de nieve y el frío hacen casi imposible visitarlo.

Visitamos el museo de Skagway, el cual cuenta con exhibiciones muy interesantes. La entrada solo tiene un costo de 2 USD y menores de 12 entran gratis.

Entre lo que se puede disfrutar en Skagway se encuentra un paseo en el tren White Pass Railway el cual se puede llevar medio día y tiene un costo de 229 USD. Este paseo ofrece vistas espectaculares que vale la pena conocer.

Nuestro crucero familiar por Alaska ha rebasado nuestras expectativas, les recomiendo que visiten Alaska, aunque puede ser un poco caro, si se reserva el crucero con mucha anticipación la tarifas pueden hacer la diferencia. Nosotros fuimos a finales de Mayo, era como el 3 crucero que salía en ese año y NCL Cruises ofreció tarifas muy accesibles.