Tallin, a este fascinante lugar en Estonia se le conoce como la Joya del Báltico. Y no es para menos, este lugar es encantador, al momento de entrar al Old Town empezó nuestra aventura medieval.
Tallin ha sido uno de mis lugares favoritos en nuestro paso por el Báltico. El puerto esta muy cerca del Old Town por lo que solo tuvimos que caminar un poco para encontrarnos con la entrada principal al Old Town.
En la entrada principal resaltan dos torres muy al estilo medieval
Aquí se puede apreciar el City Wall que rodea la ciudad
Nos sorprendió que hubiera mucha gente con vestimenta medieval, eso puso un poco de realismo al caminar por las calles, parecía como que nos transportabamos a otra época
El festival de Lille se estaba presentando en esas fechas
Caminamos para ver las diversas exposiciones que había justo al lado del City Wall
En la Iglesia de St. Olaf’s subimos y pudimos apreciar esta vista panorámica de la hermosa ciudad
Esta foto no le hace justicia a la hermosa Catedral de Alexander Nevsky
Justo a unos pasos de la Catedral mi hijo encontró este campo de tiro al arco, lo cual disfruto mucho
La belleza de Tallin es indiscutible
No podíamos irnos sin antes pasar a darnos un verdadero festín en el restaurante Olde Hansa. El restaurante solo es iluminado por velas y el menú es algo fuera de serie
Sin duda alguna este lugar quedara por siempre en nuestras memorias mas queridas
TIPS: Este lugar puede ser recorrido fácilmente caminando y disfrutando de los bellos paisajes. Ir a comer al Olde Hansa es casi obligatorio.